lunes, 28 de febrero de 2011

LA RISA ES EL GESTO...

La risa crece hasta cubrir todos los espacios. Es comunicante: reímos con la risa de otros y nuestra risa repite, como un eco, esas expresiones ajenas. Tanto más insostenibles los argumentos, tanto más absurdas las razones, tanto más fácilmente la hilaridad nos permite superar nuestro desagrado ante ellos; banalizarlos. Por la risa profanamos argumentos y vulneramos creencias. Por la risa los dogmas se desfiguran y las razones se subvierten. Reír nos distancia de cuanto pueda lucir solemne. De hecho, la risa puede ser la más demoledora respuesta contra la solemnidad, sobre todo, cuando ésta luce innecesaria o excesiva.