jueves, 21 de julio de 2011

LA MÁS EXTRAORDINARIA POTESTAD...

La más extraordinaria potestad de los seres de palabras: nombrar sus sentimientos que son, también, los sentimientos de todos los hombres. En la medida en que las imágenes creadas por su voz alcancen su espacio social y lo cubran, podremos hablar del más alto destino concebible para el ser de palabras: escribir los símbolos que identifican lo humano.